¿Nunca les ha pasado que hay veces que tienen cierto anhelo por algo que rara vez tienen en su vida? Ya sea tener a un ser querido cerca, leer un buen libro o como en mi caso: comer un buen pedazo de quiche. Para serles honesta no recuerdo la última vez que comí quiche aparte de esta tarde. Pienso que quizás fue en un desayuno de trabajo o algo así, la verdad es que no tengo ni idea pero desde hace una semana o así, tengo tremendo antojo de comer uno… Desde la semana pasada tengo los ingredientes en la nevera pero por alguna razón no la hice. Ese ya no es el caso, porque hoy me desperté con esas ganas de hacer cosas, como hacer un quiche y darle cariño al blog y aquí está:
Quiche de champiñones, cebollas y queso Parmesano.
Necesitarás:
Aunque yo utilicé una pre-hecha del supermercado, esta receta siempre funciona perfectamente:
- 1 1/4 Taza de harina de trigo
- 1/2 Cucharadita de sal
- 1/4 Cucharadita de azúcar
- 1/2 taza de mantequilla sin sal, fría y cortada en trozos
- 2-3 Cucharadas de agua fría
Para el relleno:
- 1 Cebolla grande
- 1 Diente de ajo
- 1 Guindilla (opcional)
- 250 gramos de Champiñones
- 4 Huevos
- 1/2 Taza de leche entera
- 4 Cucharadas de Aceite de Oliva
- 2 Cucharadas de Mantequilla
- 1/2 Taza de queso Parmesano
- Perejil
- Sal y pimienta al gusto
Proceso:
Para la masa yo utilicé una masa pre-hecha del supermercado, pero si la quieren hacerla desde 0, esta receta de unos de mis blogs favoritos Smitten Kitchen es casi perfecta.
El relleno:
Pre calentar el horno a 190°C.
- Cortar todos la cebolla y saltearla en dos cucharaditas de aceite de oliva con el diente de ajo y la guindilla hasta que estén bien suaves, apartar y remover la guindilla y el ajo.
- Saltear los champiñones con dos cucharaditas de aceite de oliva, sal y pimienta, cuando estén bien cocidos remover del fuego y apartar.
- Batir los 4 huevos con la media taza de leche, sal y pimienta. Cuando la cebolla y los champiñones esten fríos, mezclar con los huevos.
- Verter la mezcla de huevos, cebolla y champiñones dentro de la masa y espolvorear el queso parmesano y un poco de perejil sobre la mezcla.
- Hornear hasta que quede dorado. Si no estás seguro del grado de cocción, puedes introducirle un palillo, cuando este salga limpio es que está cocido.
