La semana pasada empecé con unos amigos la #rutadelbrunch, donde buscamos el brunch definitivo en la ciudad de Santo Domingo, esta semana toca Gallo Pinto Café. Acompañada por mis dos buenas amigas Mía y Mariela, quienes aman la #rutadelbrunch.

Empecemos con Gallo Pinto Café, y voy a ser totalmente honesta. Desde que lleguamos el host (un factor que muchos restaurantes de la ciudad realmente carecen) nos llevo a una mesa e inmediatemente nos dio la carta de bebidas. Sonaba música de Vampire Weekend, algo que hacía la experiencia y el ambiente mejor mientras cada canción pasaba.

Voy a admitir que el bar de limonadas me llamo la atención por encima de cualquier coctel, ya que amo las limonadas. Me decidí por la limonada de Pepino y Menta porque soy aventurera. 

 Excelente la Limonada de Pepino y Menta (RD$125, US$3, €2.27) y no por el buen precio, mas bien porque odio la limonada pre-hecha y esta no lo era, lo mejor de tomarse una limonada es que realmente sepa a limón y no a dos litros de azúcar, esta tenía el balance perfecto entre la menta y el limón, y los trocitos de pepino le daba una frescura inigualable, realmente no era lo que yo esperaba, fue algo mucho mejor. Este lugar empezaba a enamorarme con esta limonada.

10/10 a la limonada.

 Llegan los menús, tienen varios: el brunch,  regular y el de ensaladas.

Así pedimos: 
Mía: Huevos florentinos y tostadas francesa
Mariela: Huevos benedictos y churros
Yo: Huevos rancheros

La espera no fue demasiada (eso que el restaurante empezaba a llenarse), el servicio nunca dejo de ser bueno, algo que me pasa el 80% de las veces que salgo a comer, llegan más personas al restaurante y los meseros de ofuscan y empiezan a atender mal.

Mientras esperabamos, Mariela y yo degustabamos de nuestras limonadas (Mariela ordenó la que tiene manzanas) y Mía de una Stela Artois, porque es una borrach, pero hey aquí nadie juzga.

Nuestra comida llego toda a la misma vez, un plus ya que no hay nada que me desespera más que mi comida llegue primero y la de los demás no, no me gusta comer cuando los otros no comen, y tampoco me gusta tener comida al frente y no poder comerla. 

Empezamos con los Huevos Florentinos de Mía
RD$250 | US$ 6.10 | €4.50

No hay nada más bonito que un huevo poché perfectamente ejecutado, cortarlo por la mitad y que ese oro líquido salga y solo mejore todo es hermoso. La crema de espinaca, la tostada y el huevo estaban perfectos, pero se les fue un poco la mano con la acidéz de la holandesa, aunque no fue algo que no nos permitio seguir comiendo porque igual estaba rico. Lo único que pido es balance. 

Quien sea que inventó los huevos poché tiene mi amor infinito.
A los Huevos Florentinos le damos un 8/10

y ahora con los Huevos Benedictos

RD$275 | US$ 6.75|  €5
 

Hermosa presentación, ¿no? siempre, siempre lo he dicho,  lo más importante de un plato es la presentación ya que la comida entra por los ojos. 

Eso que ven ahí NO ES BACON, es Prosciutto Frito… un saludo al chef ejecutivo de Gallo Pinto que tuvo esa hermosa idea… oh señor en todo lo alto el prosciutto frito es la comida de los dioses ¿verdad? Si tenemos alguna queja de estos huevos benedictos es que, de nuevo, se pasaron un poquito con la acidéz en la holandesa, pero además de eso… fabuloso.

Le damos un 8.5/10

Huevos Rancheros
RD$325 | US$ 9.29 | €6.80
 

La presentación pudo estar mejor, la única forma que puedo obviar una presentación que no me guste tanto es cuando el sabor me da una patada en la boca y no quiero dejar de comer, lo que sí hicieron estos huevos. Repito nuevo: balance, todos los sabores iban en perfecta armonía uno con el otro, el guacamole con el queso y el picante con los huevos. Este es uno de esos platos perfectos de brunch para una resaca, te comes esto con una limonada y estas NUEVO.

Qué bonita sorpresa entre los nachos, huevos over-easy (suaves), con salsa picante (pero no demasiado picante!)  para acompañar todo. Una sola palabra: RIQUEZ.

Le damos un 9/10

Ahora a lo dulce:

Tostadas Francesas con fresas y guineos
RD$250 | US$ 6.10 | €4.50

 

No soy una persona que le vuelve loca las tostadas francesas… pero… oh.my.god. esto no lo podía dejar de comer, aquí, sí AQUÍ fue donde me enamore perdidamente de Gallo Pinto Café, no sé  qué rayos le hicieron a esos guineos pero estaban, perfectamente carmelizados… O ALGO, oye que si alguien me trae este plato a la cama de desayuno tiene mi corazón por el resto de los tiempos.

Le damos un 9/10

Y ahora a los churros… oye que somos unas morsas no nos juzguen.

 Los churros tenían dos salsas, una de chocolate oscuro y dulce de leche. Ambas riquísimas pero la de dulce de leche me podría bañar en ella.