Lo único que puedo decir que me “gusta” de las despedidas son los reencuentros, el no decir adiós, mas bien “hasta luego” con ese nudito en la garganta al no saber cuando es que se volverá a tener una noche de risas, cervezas, cuentos y comida. Esta noche fue exactamente eso, una despedida. Mi mejor amiga, mi hermana de otra madre, Victoria regresa a Nueva York y la despedimos de la mejor manera que sabemos, con una noche de tacos en su casa y sobremesa de temas inapropiados.
el pico de gallo es mi favorito |
chistes malos |
Las despedidas no son mal, hacen bien, te hacen mirar al futuro, apreciar más los momentos como estos, risas, historias inapropiadas, rodar después de tanto comer… en fin estar en buena compañía.