Personal
Leave a comment

Fin de semana en Oviedo



Este fin de semana que pasó, estuve en Oviedo, he regresado a Barcelona con 10 libras de más y estaba preocupada de que no me admitieran en el avión por sobre peso, no pero en serio cuanto comer. Es una ciudad bastante tranquila y muy bonita, donde se come y se bebe MUY bien…también se pasea pero para mí fue un segundo plano.





Primero a lo primero, la Fabada Asturiana, que aunque es un plato que no me llama demasiada la atención porque tiene tanta grasa y el embutido al que más le temo (la morcilla), es un must si estás interesado en probar un plato muy típico de la gastronomía de Asturias, es un cocido tradicional que tiene alubias blancas, chorizo, morcilla y lacón.


Después de esta ‘fartura’ como dicen en Asturias, comí un segundo plato (sí porque la fabada era un primero) que consistía en un Lenguado relleno de cangrejo, rebozado y frito con guarnición de ensalada, gambas y patata…
Después de todo este blog es ‘ella quien come’ no ella quien deja la comida.




Y después, claro un café.

 

 …Y caminar un poco por el Parque San Francisco 🙂



En la noche me llevaron a la Gascona: el bulevar de la sidra de Oviedo, este es el lugar que vas para probar las mejores sidras locales.



Donde probé esta sidra, y a 2€ la botella ¿a quién no le gusta? 🙂


Con la sidra, nos daban percebes de tapa, algo que nunca había probado antes y la verdad que me daba MUCHA grima probarlas, parecen patas de dragón… pero nada después de llenarme de valor los probé y la verdad es que son muy buenos! 





Luego de 4 botellas de sidra, percebes y ver al Barça perder contra el atlético de Bilbao, tocaba cena. Para picar:



Chipirones a la plancha y croquetas de jamón, también navajas y chorizo a la sidra que se me pasó fotografiar… y de plato fuerte ¡Chuletón a la piedra! (todo esto era para compartir entre 5 personas)


Tras la cena, tocaron unas copitas y para la casa… La verdad es que Oviedo es una ciudad muy, muy bonita, lamentablamente por la crisis la gente se está yendo de ahí y no hay demasiada vida, pero igual les dejo con unas cuantas fotos más de mis fin de semana tranquilo por allí.


Mi amiga Angie haciendo de modelo 🙂


La fachada de esta casa (abandonada) me recordó muchísimo a American Horror Story
Cris odia que le hagan fotos

  






Gracias especiales a Angie y Frank por acogerme en su piso, que tenía la vista más bonita que he visto en mucho tiempo, después de tanta tranquilidad tocaba regresar al ajetreo de Barcelona, el cual me fascina, pero lo que realmente odio es esperar en los aeropuertos.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *